Hombre que mató con una varilla a la gata Alana en Montería salió a pedir perdón: ‘He recibido amenazas’
“No lo perdono”: dueña de Alana exige justicia por el asesinato de su gata
Un indignante caso de maltrato animal se conoció en pasados días en Montería, Córdoba. Allí un hombre identificado como Wilson Guerrero agredió brutalmente con una varilla a una gata de seis meses hasta producirle la muerte.
La agresión contra la mascota se produjo el pasado 30 de julio y quedó registrada tanto en cámaras de seguridad como por la dueña de la mascota.
Luego de que la gata Alana fuera trasladada a la veterinaria, se determinó que tenía graves lesiones en su cuerpo, la pérdida de un ojo y fractura en la mandíbula que causaron su fallecimiento.
Por medio de un video, el agresor del animal ofreció disculpas y aseguró que ha recibido amenazas a tal punto que tuvo que irse de Montería.
Tuve un inconveniente en mi sector. Primero que todo le pido perdón a Dios, estoy bastante arrepentido. Le pido perdón a mi comunidad por este hecho. Le pido perdón al dueño de la mascota. En este momento, mi familia y yo nos vimos obligados a salir de la ciudad por amenazas, por ese hecho ha empeorado mi situación de salud, física y mental. Soy paciente cardiaco y tengo otras patologías «, fueron las palabras de este hombre.
Por otro lado, con voz firme y llena de dolor, Génesis Angulo García, la joven que denunció el brutal asesinato de su gata Alana, aseguró que no puede perdonar al responsable del hecho y exige justicia.
“No lo perdono, si yo no me hubiera dado cuenta de lo que estaba pasando, la habría matado y escondido como si nada. Y ahora quiere mostrar arrepentimiento solo porque se hizo público”, manifestó Génesis, visiblemente afectada.
Según informó la Alcaldía de Montería, la investigación por maltrato animal fue asignada al Grupo Especial para la Lucha contra el Maltrato Animal (Gelma) y se dispuso un grupo de investigadores del CTI para legalizar toda la actividad policial a fin de esclarecer lo más rápido este hecho de violencia.
Así mismo, se inició formalmente un proceso penal contra el agresor, quien enfrentaría cargos por lesiones graves agravadas, tipificados en el artículo 339C del Código Penal, en el marco de la Ley Ángel, que protege los derechos de los animales.
