
Un joven que se habría negado a participar en el ataque contra el grupo de 33 uniformados, retenidos por más de 100 horas en zona rural de El Retorno, Guaviare, fue golpeado por integrantes del Frente 44 de las disidencias de las Farc y posteriormente llevado con rumbo desconocido
En la tarde del miércoles 27 de agosto, el grupo de militares del Comando Conjunto de Operaciones Especiales (CCOES) permanecía secuestrado en la vereda Nueva York, en El Retorno, Guaviare, cuando los campesinos ingresaron al salón con un joven que presentaba heridas en su rostro y en varias partes del cuerpo.
Ante la gravedad de los golpes, dos enfermeros de combate se acercaron para evaluar su estado de salud. El diagnóstico inicial fue que sufría múltiples hematomas y taquicardia, lo que hacía necesario su traslado a un centro médico.
Según información preliminar, el joven había sido golpeado por orden de alias Jimmy Martínez, cabecilla del Frente 44, quien también ordenó la asonada de unos 600 pobladores contra los uniformados, en represalia por una operación en la que murieron varios integrantes del bloque Martín Villa de esa estructura ilegal.
“Martínez envió al joven para que atacara a los uniformados retenidos en una vivienda de la vereda Nueva York. Al negarse a cumplir la orden, dispuso que lo golpearan y lo llevaran al lugar para mostrarle a la comunidad lo que podía sucederles si desobedecían”, relató una fuente militar.
Tras ser estabilizado, varios hombres (al parecer enviados por Martínez) llegaron al salón para llevarse nuevamente al joven. Los militares se negaron en un principio a entregarlo, debido a sus heridas, pero minutos después accedieron bajo la condición de dejar un acta en la que constara que ellos no lo habían agredido y que lo entregaban en mal estado.
El documento fue firmado tanto por los uniformados como por una comisión de campesinos que los custodiaba. Posteriormente, el joven fue sacado del lugar con rumbo desconocido.
El hecho fue denunciado en la madrugada del viernes 29 de agosto por el presidente Gustavo Petro, a través de su cuenta en X, señalando que el campesino permanece desaparecido.
Hasta ahora, no se tiene información sobre el paradero del hombre, lo que mantiene en alerta a las Fuerzas Militares y a la Defensoría del Pueblo. “Esperamos que esa persona esté bien, pero lo sucedido es un delito de lesa humanidad”, señaló el comandante de las Fuerzas Militares, almirante Francisco Cubides.
Finalmente, tras 105 horas de cautiverio, los 33 uniformados fueron entregados a una comisión de la Defensoría del Pueblo y de Naciones Unidas, y recibidos por el comandante general de las Fuerzas Militares, almirante Francisco Cubides, y el general Luis Cardozo, comandante del Ejército.